Trasvase del Ebro

Comunicado sobre el proyecto de Trasvase del Ebro y política hidráulica nacional

Recientemente, algunos medios de comunicación han atribuido a UPyD posturas favorables o contrarias al Trasvase del Ebro. Queremos aclarar a la opinión pública que nuestra posición ante este proyecto de política hidráulica o cualquier otro comparable formará parte del Programa Electoral de Unión Progreso y Democracia, que está en fase de discusión. Por lo tanto, no tenemos decidida una posición definitiva respecto al Trasvase del Ebro, proyecto que consideramos debería debatirse en un ambiente de tranquilidad y racionalidad desapasionada que ahora mismo no existe.

Nuestros principios abogan por una política de Estado que considere tanto el agua como otros recursos básicos –como la tierra, el aire o las materias primas- propiedades nacionales que no deberían considerarse reservadas a uno u otro territorio en exclusiva. Estos bienes comunes básicos deberían utilizarse y preservarse considerando el bien común y en función de sólidos criterios económicos, ecológicos y de ordenación racional del territorio afectado. También debería tenerse en cuenta tanto los usos para los que se solicita el trasvase hidráulico como la satisfacción de las necesidades de las personas afectadas, que en última instancia debería considerarse el objetivo básico de cualquier política nacional.

UPyD considera lamentable que la total ausencia de una política fundada en la cohesión nacional y en la gestión racional de los recursos haya conseguido que afloren ridículas manifestaciones de nacionalismo o regionalismo victimista que trata de la política hidráulica o cualquier otra comparable en términos de robo, depredación o atropello de supuestos monopolios historicos de ciertos recursos naturales o de derecho a recibirlos sin otras consideraciones, quejas completamente irracionales muchas veces. Consideramos que cualquier trasvase o gran obra de política hidráulica debería ser considerada en sí misma y con relación a la mejor gestión de los intereses comunes, sin introducir reclamaciones como la “propiedad exclusiva” del agua de un sistema fluvial. En este sentido, UPyD propone que sea el Estado quien recupere, mediante la adecuada reforma constitucional, las competencias de gestión de recursos básicos como los ríos y sus cuencas, cedidas sin la adecuada reflexión, mediante la respectiva reforma del Estatuto de Autonomía, a comunidades autónomas e intereses privados que ahora proclaman la “propiedad” de todo un río y de la lluvia o nieve –en fin, del régimen climático- que afecta a su cuenca. Tal exigencia tiene poco o ningún sentido en una época donde el debate por las posibles consecuencias de un cambio climático a escala planetaria dejan claro que no deberían imponerse los intereses locales sin tomar en consideración.

En consecuencia, UPyD se compromete a no adoptar respecto al Trasvase del Ebro una actitud que dependa de los intereses dominantes en una u otra región afectada, normalmente reclamados por el viejo partido hegemónico. Nuestra posición será debatida y definida a nivel nacional y por tanto asumida y respaldada por Unión Progreso y Democracia en todo nuestro país.