El Estado del Bienestar

¿La sociedad española se encuentra en el estado del bienestar?

Desde la Wikipedia, se define Estado del Bienestar cuando "el Estado asegura la protección social, entendida ésta como los derechos a la sanidad, vivienda, educación, servicios sociales, pensiones de jubilación y la protección del empleo o el empleado".

Sin embargo, nada más lejos de la realidad. El Estado del Bienestar se está deteriorando a grandes pasos en esta España de hoy en día, estando perjudicados principalmente aquellos colectivos con pocos recursos económicos o los jóvenes. De hecho, el Gobierno no sólo no da protección social, sino que se anima a ir deteriorando dicha protección en aras de un capitalismo feroz.

Desde el punto de vista de la sanidad, en Aragón somos conscientes de los recursos limitados con los que cuenta el Sistema Aragonés de Salud, donde las listas de espera se traducen en meses y meses de espera cuando un paciente debe ser atendido por un especialista.

Desde el punto de vista de la vivienda, el acceso a la vivienda al futuro de la sociedad ha sido gravemente limitado, según el Estudio del Observatorio Joven de Vivienda en España. En el caso de Aragón, el 52,2% de los Aragoneses entre 18 y 34 años aún no ha podido independizarse, ya que "En el segundo trimestre de 2007, para poder adquirir una vivienda libre sin asumir demasiados riesgos financieros, es decir, sin tener que superar un endeudamiento superior al 30% de la renta, una persona joven debería percibir un salario un 126,05% mayor que el actual y un hogar joven ya existente, pese a su mayor capacidad adquisitiva, ingresar un 41,92% más de lo que percibe hoy en día. La discrepancia entre los ingresos mínimos necesarios para comprar con solvencia una vivienda libre" (datos de España).

Desde el punto de vista de la educación, el modelo actual se ha visto claramente insuficiente. Diversos estudios y encuestas del sector educativo ha demostrado una grave carencia tanto a nivel cultural como de educación propiamente dicha. El informe PISA, tan ampliamente mencionado por los medios de comunicación durante estos días atrás, es sorprendentemente alabado por fuentes del Gobierno Autonómico. Además de graves carencias educativas desveladas por dicho informe, Aragón debe avanzar hacia una normalización delos contenidos educativos y una mayor cohesión con el resto del Estado, amén de una política seria educativa que palie el fracaso escolar y la ausencia de cultura en la sociedad.

Respecto a los servicios sociales, se definen éstos como "actividades técnicas organizadas por las administraciones públicas y enmarcadas dentro de las políticas de bienestar social, cuyo objetivo es la prevención, rehabilitación o asistencia de individuos, de familias o de grupos sociales con amplias carencias y demandas, en pro de la igualdad de oportunidades, la realización personal, la integración social y la solidaridad." (Encarta). En este sentido, no merece la pena realizar una lectura de este aspecto del Estado del Bienestar, ya que salta a la vista que en la actualidad, existen pocos o nulos recursos dedicados a los servicios sociales en aras de la comunidad.

Dentro del apartado pensiones de jubilación, moneda de cambio de los principales partidos políticos para aglutinar el voto, de hecho es un sistema que puede convertirse en deficitario a partir del 2015, lo que provocó que una de las medidas estrellas de Caldera fuera que nuestros mayores trabajaran hasta los 70 años para obtener un 15% de bonificación. Realmente espeluznante, sobre todo en trabajos de carácter físico como la agricultura.

Finalmente, frente a la protección del empleo, taza y media. Siendo una de las principales preocupaciones de los españoles según del barómetro del CIS, las medidas no son efectivas, y la calidad del empleo inadecuada, así como los factores de productividad, temporalidad, e índice de desempleo.

Nada más lejos de la realidad. En España hay muchos temas que mejorar enormemente. Así mismo debe ser en Aragón, donde no nos conozcan únicamente por una Exposición de tres meses, o un Casino en los Monegros, sino por una seriedad similar al estereotipo alemán. ¿O acaso estamos aún anclados en el antiguo Reino de Aragón?